Sailor Moon y Los Star Warriors; Capítulo 3.09

Sailor Moon
y

Los Star Warriors

Los Star Warriors Evolution, Episodio Especial.
Capítulo 3.- El Legendario Time One.
SC-09: EL Príncipe Lagr del Planeta Alhar.

Tres líneas luminosas descendieron desde el centro de aquella explosión en el aire, y se estrellaron rompiendo el piso formando grandes fosas. A ambos lados cayeron los monstruos pterodáctilos, incluso uno de ellos cayó muy cerca de donde estaban las chicas con Adrián. En el centro del patio del templo cayó lo que al principio creyeron que era un gran paracaídas, o una enorme manta blanca. Pero no tardó en extenderse, y lo que al principio parecía una gran extensión de tela resultaron ser un par de magníficas alas blancas y redondas, cual alas gigantescas de mariposa, con una franja azul a unos centímetros del borde de estas. Inmediatamente, el color de aquellas magníficas alas cambió a una especie de tono metálico el cual, nunca nade de los presentes había visto (excepto, tal vez, Eni y Adrián), al tiempo que las empezaba a rodear un misterioso destello de color verde.

Lentamente un joven guerrero se fue poniendo en pié. Lucía una reluciente armadura formada por botas hasta debajo de la rodilla, unos guantes hasta el pliegue del codo, un cinturón (que a Serena se le figuró muy parecido al que ella había usado para viajar en el tiempo), y hombreras ovaladas; todo este conjunto en color blanco metálico, y con una delgada franja azul cerca de la orilla. Bajo la armadura, vestía un traje completamente ajustado al cuerpo, de color blanco y una franja azul en los costados, la cual se comenzaba a hacer más ancha a la altura del vientre, hasta juntarse en dos puntas triangulares por debajo de los músculos pectorales; Dibujado en el centro del pecho, tenía un dragón japonés, alargado y enroscado en su propio cuerpo. La franja azul que recorría los costados de su traje, también continuaba por sus brazos, y en cada uno de sus hombros llevaba un emblema diferente: en el izquierdo llevaba un círculo gris con una especie de estrella sin uno de sus lados; en el derecho, un óvalo formado por dos círculos que en realidad eran una letra S y una W plateados y separados por un rayo de color azul brillante en el centro. Su rostro permitía ver una piel clara, ojos color azul brillante y el cabello y las cejas de color verde tan brillante como las esmeraldas y tan luminoso como el neón, y en la frente lucía algo muy parecido a una tiara, que más bien aparentaba ser una cinta de color azul metálico, que formaba una figura triangular hasta el entrecejo, donde destellaba una piedra de cristal azul claro, a través de la cual se podía ver la misma figura del dragón que tenía dibujado en el pecho. En su muñeca derecha llevaba una pieza de metal azul ovalada donde se podía distinguir una letra “e” circulada, como si se tratara de una “@”, pero en “e”; y contrastando con sus guantes, se podía distinguir un anillo en su dedo anular derecho. Además de las alas, ese guerrero lucía, como extremidad extra, una larga y delgada cola, cual cola de león o mono. Todo alrededor del joven guerrero era iluminado por un destello que figuraba unas llamas del mismo color verde de su cabello, pero completamente transparentes, como un poderoso flujo de energía que emanaba constantemente hacia el cielo.

— ¿Y tú quien te crees para venir a interrumpir en mis planes? —Pregunto el primer monstruo completamente furioso.

El guerrero no respondió, recorrió el lugar con la mirada y se detuvo unos segundos en las chicas. Luego pareció darse cuenta de la presencia de Adrián y de Eni, a quienes les dirigió una amistosa mirada, que nunca perdió su firmeza y autoridad. Giró sobre sí y vio, por encima del monstruo a Tuxido Mask, que aún estaba de pié frente a Rei protegiéndola. Entonces su mirada fue hacia el monstruo, y giró la cabeza rápidamente de lado a lado para ver a los otros dos y luego regresar al primero.

— ¿Te encuentras bien, Tuxido Mask? —Su voz, tal y como la recordaban Serena y sus amigas, resonaba como si tuviera un amplificador integrado en la garganta, pero sin que su volumen fuera más alto que lo justamente necesario — ¿Se encuentra bien ella?

Tuxido Mask, algo confundido por la aparición de un extraño que le llamaba por su propio nombre, titubeo un poco antes de responder que él se encontraba bien, y correr a verificar el estado de Rei.

— ¡Te haces el interesante, maldito insecto! —Replicó el monstruo —No importa quién seas… no impedirás que me apodere del Poder Evolution.

Repentinamente, el guerrero levantó la mano y lo apuntó con un dedo. El monstruo se paralizó de miedo, mientras la voz del guerrero se dejaba oír resonando quedamente.

—Tus medios son patéticos, y tus procederes, pusilánimes. ¡Tu objetivo lo desconozco, pero sé a la perfección que no es el Poder Evolution! Y mientras criaturas desagradables como tú estén presentes causando el caos y la destrucción, yo estaré aquí para proteger a los inocentes.

» ¡Yo, soy el Príncipe Lagr (Láyir) del planeta Alhar! ¡Soy un Star Warrior, y soy un guerrero de la estrella de la bondad, que lucha por la paz y la justicia! Soy el líder de los Time Warriors, el “Dragón de la Fuerza”, ¡TIME ONE! —Tras su presentación, una explosión de humo y luces dibujó en el aire la misma figura del dragón que Time One llevaba dibujado en el pecho.

El monstruo echó a reír descontroladamente, y miraba a Time One con lágrimas en los ojos, producto de la risa.

— ¿Qué clase de ridiculez es esa? —Dijo sujetándose en vientre para contener la risa

— ¡Oye! —Reclamó Time One evidentemente ofendido, y su actitud cambió drásticamente, de una feroz y amenazadora a una completamente posada y engreída. — ¿Tienes idea de cuánto tiempo tuve que observar a las Sailor Scouts para saber cómo debía decirlo… y luego trabajar en modificarlo para adaptarlo a mí, quitarle el toque femenino y agregarle el masculino, ponerle un poco más de fuerza y agresividad, puntualizar todos mis títulos, y…

Time One no pudo terminar su reclamo, pues el monstruo, obviamente aburrido había abierto sus fauces y le disparó un rayo de energía en la cara. El Príncipe Lagr retrocedió varios metros impulsado por la energía de su enemigo, hasta que con su antebrazo se quitó el rayo de la cara y éste explotó en el cielo.

—De acuerdo —dijo como si tal cosa. No había sufrido ningún daño con el ataque. —Si no te gustó, no y ya, pero no tenías porqué escupirme. Por cierto, ¿Hace cuánto que no te lavas los dientes, sabes? ¡Apestas!

A Serena le hizo gracia ese cambio de actitud, pues le recordó la primera vez que vio a Luis, cuando éste la defendió de unos niños en el centro de videojuegos, y su actitud se mostraba tan engreída como la que mostraba aquel guerrero en ese momento. Y hablando de Luis… ¿Dónde estaba? ¿Por qué aún no había regresado?

La sonrisa en el rostro del monstruo se pronunció notablemente. Miró alternadamente ambas fosas alrededor de Time 1. Eni tuvo un mal presentimiento de ese comportamiento, así que lenta y disimuladamente se aproximó a la fosa que le quedaba más cerca.

— ¡Mátenlo! —Ordenó el monstruo, y al instante reaparecieron los dos pterodáctilos humanoides dispuestos a atacar.

— ¡Hey! ¡Tú! —Gritó Eni, llamando la atención del monstruo que tenía más cerca. Cuando éste la miró, ella le propinó tal cantidad de patadas como nunca podría recibir un balón de Fútbol en toda su vida útil.

Al mismo tiempo, Time 1 tomó al pterodáctilo del lado opuesto por el pico, y tras golpearlo severamente, lo tomó por la cola y lo lanzó hacia el vacío de las alturas. Enseguida se giró, justo a tiempo para recibir al otro monstruo que Eni había lanzado de una gran patada, y lo recibió con una gran bola de energía, que al igual que a su compañero, terminó proyectándolo hacia el infinito.

El otro monstruo, el que no tenía alas, completamente enfurecido se lanzó hacia Time 1 apuntándolo con sus poderosas garras, las cuales ya había regenerado. Time 1, que le estaba dando la espalda, colocó su puño derecho a la altura de su hombro izquierdo, y con un movimiento brusco, lo extendió, dejando su mano abierta al lado derecho de su cadera. Hubo un pequeño destello en la palma de su mano, donde apareció una empuñadura blanca, y una especie de cuchillo, daga o puñal de cristal. Giró rápidamente para hacer frente a su enemigo, y la hoja de la daga de cristal se alargó hasta transformarse en una maravillosa espada de cristal, la cual se estrelló con las garras del monstruo. El duelo se tornó genial, pues era un espectáculo digno de ver. En pocos segundos volvieron a descender los pterodáctilos, atacando a Time One desde el aire con ataques de energía. Time One agitó fuertemente una de sus alas, lo que provocó un ventarrón que alejó al monstruo con el que estaba peleando, y luego, aprovechó el impulso que le dio ese movimiento para elevar el vuelo y atacar a los pterodáctilos en el aire.

El monstruo reptil se incorporó, y al ver que Time One estaba entretenido decidió ir de nuevo en busca de su objetivo principal. Tuxido Mask ya había ayudado a Rei a ponerse en pié, pero ella aún estaba muy débil. El monstruo les cortó el paso y le exigió a Tuxido que le entregara a la chica. Tuxido ayudó a Rei a acomodarse nuevamente en el suelo y luego se enfrentó al monstruo.

Serena estaba tanto asustada como emocionada. Le maravillaba los poderes que mostraban, tanto Time One, como los monstruos, y le angustiaba la idea de no poder participar en la pelea. Estaba tan sumergida en sus pensamientos, que tardó unos instantes en percatarse que junto a ellas se escuchaban otras voces igual de maravilladas. Cuando se dio cuenta, giró y vio que todo el rededor del templo se había llenado de gente y curiosos atraídos por el espectáculo aéreo que ofrecían Time One y los Pterodáctilos. Si en algún momento se hubiera podido dar la oportunidad para que se escapara y pudiera transformarse, ahora parecía más imposible que nunca.

En el cielo, Time One tenía dificultades para deshacerse de los dos monstruos que lo atacaban. Se alejó un tanto de ellos y realizó varios movimientos extraños con sus manos, para luego proyectar una nueva bola de energía, mucho más grande y rara que jamás habían visto.

— ¡Bomba Espíritu! —Gritó Time One, al tiempo que lanzaba aquella bola de color azul translúcido, muy parecida al color de sus alas. La bola dio directamente en uno de los monstruos que volaba hacia él, y el monstruo fue elevado una vez más hacia el infinito y retorciéndose de dolor

Luego, algo que le sorprendió muchísimo a Serena, pues Time One colocó sus brazos frente a su pecho formando una “X” con los puños hacia arriba, y en un segundo desapareció reapareciendo inmediatamente tras el monstruo que quedaba. ¡Era la misma técnica de la teletransportación que había usado Luis esa mañana!

— ¡Halo del dragón que emerge! —Gritó nuevamente Time One, y la figura luminosa del Dragón que habían visto hacía dos semanas volvió a aparecer fulminando completamente al monstruo que quedaba. En ese momento iba cayendo el primero de los Pterodáctilos. Entonces Time One tomó la pieza ovalada azul con la “e” que llevaba en la muñeca y apuntó a ese monstruo — ¡Evolutor, Captura! —Del Evolutor (aquella pieza ovalada) salió un destello color turquesa transparente que dio directo en el monstruo, y aparentemente comenzó a succionar su energía, mientras este se retorcía dando gritos de dolor.

En tierra las cosas no iban tan bien, pues la pelea entre Tuxido Mask y el primer monstruo dio un giro inesperado, cuando el monstruo atravesó a Tuxido con una de sus garras. Tuxido Mask cayó al suelo perdiendo grandes cantidades de sangre, y el monstruo aprovechó para seguir su camino hacia Rei.

En el cielo, Time One continuaba absorbiendo la energía del monstruo, cuando apareció el segundo pterodáctilo y lo golpeó lanzándolo al suelo. En su caída, Time One corrigió su rumbo, volando en dirección al monstruo que atacaba a Rei.

Era un detalle muy curioso, que Amy se encargó de destacar, pues Time One no usaba sus alas para volar. Según Amy, sus alas debían moverse demasiado rápido para poder sostenerlo en el aire, o estar completamente extendidas para permitirle planear. Sin embargo, Time One parecía usar sus alas solamente como una capa.

El monstruo en tierra se dio cuenta que Time One se dirigía hacia él, y giró sobre sí mismo para dibujar en el aire un medio anillo metálico. El arco de energía metálica creció y se precipitó rápidamente en dirección a Time One. Éste no se dejó intimidar, y extendió su brazo lanzando un disco de energía, el cual cortó en dos el ataque del monstruo, destruyéndolo, y continuó su camino hasta cortarle completamente el brazo izquierdo al monstruo.

El pterodáctilo al que Time One le había absorbido energía, seguía retorciéndose en el cielo. Drásticamente comenzó a aumentar su tamaño para convertirse, de un pterodáctilo humanoide en uno real, con un cuerpo de más de tres metros de largo y unas alas que podían alcanzar los 12 metros de punta a punta. Dio un fuerte rugido y voló en dirección a la ciudad. Time One dio un paso para ir a detenerlo, pero un nuevo grito de dolor a sus espaldas lo detuvo.

Continuará…

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En el Siguiente sub-capítulo:

Continúa la batalla entre Time One y los monstruos, aunque parece que no es tan fácil como él lo imaginaba. Sin embargo, el Poder Evolution dentro del cuerpo de Rei está a punto de darle un giro inesperado a la pelea.

SM&SW-3.10: Magna Sailor Mars

De pronto tener tanto poder ya no parece tan maravilloso