domingo, 8 de septiembre de 2013

Sailor Moon y Los Star Warriors; Capítulo 7.15 (Final)


 

Sailor Moon
y
Los Star Warriors

Los Star Warriors Evolution, Episodio Especial.
Capítulo 7.- Los Dark Warriors.
SC-15: Involución.

Los Light Warriors y Time Eight se elevaron en el aire y desaparecieron.

Ya era más tarde, y Serena aún disfrutaba su tarde con los Five Lights y las Estrellas de Fuego que no estaban enfermas. Pero en su casa las cosas no iban tan bien.

Luis Seguía con fiebre, y aún tenía aquellos espasmos en los que parecía que su cuerpo se dividía en dos. En ausencia de Serena, esa tarde Rinny subió a cambiar el agua de sus compresas. Ella pensaba que Luis estaría inconsciente, así que se asustó muchísimo cuando lo oyó hablar.

—La radiación… mi cuerpo… solo algunos… de nosotros… mis moléculas… se dividen… la respuesta está en nosotros… —Eran puras incoherencias, por lo que Rinny se preocupó aún más.

— ¡Tranquilízate, Luis! Estás delirando por la fiebre. Verás que con esta agua fresca te pondrás mejor.

— ¡Rinny…! Por favor… —Su voz, aunque cortada y debilitada, ahora sonaba coherente, Y Rinny se impresionó al grado de soltar la compresa y dejarla caer. Mientras Luis hablaba hacía esfuerzos por sacar su mano derecha de debajo de las sábanas. —Mi pulsera… no la tengo… y la necesito…

— ¿Tu pulsera negra? ¿Con la que atraías el poder evolution para que no te afecte?

—Creo que Mamá Ikuko la puso… en aquel cajón… —Y señaló el buró con mucho esfuerzo.

Rinny corrió a abrir el cajón, pero no encontró la pulsera. Sin embargo lo que vio la hizo dar un grito ahogado que no pudo disimular. Luis abrió los ojos con debilidad y trató de leer la expresión de Rinny.

—Es… el evolutor… ¿Verdad?

Rinny asintió sin palabras. ¿Qué tenía que hacer Luis con un Evolutor?

—No importa… —suspiró Luis. —Creo que funcionará igual… ¿Me lo podrás dar…? ¿Por favor?

Aún con ciertas dudas, Rinny le entregó el Evolutor a Luis. Luego se le ocurrió que tal vez Luis no lo usaría frente a ella, así que se apresuró a salir de su habitación.

Una vez solo, Luis sujetó el Evolutor con todas sus fuerzas, respiró profundo un par de veces, y luego pronunció una única palabra que le salió casi como un susurro.

— ¡Involución!

El Evolutor se encendió y un destello azul-plateado envolvió el cuerpo entero de Luis. Fueron solo unos segundos cuando el destello se apagó, y el evolutor se tornó opaco.

Luis Abrió los ojos, respiró profundo y esperó. Después dejó fluir su respiración, se había normalizado. Rápidamente tocó su rostro para comprobar que la fiebre había desaparecido, y lo sorprendió la rápida respuesta de su mano. Esto lo invitó a comprobar su movilidad y la de cada una de sus articulaciones, empezando por sus dedos, muñecas, codos y finalmente todo el brazo. ¡Todo funcionaba perfecto! Hizo un nuevo esfuerzo y quedo sentado en la cama. Sorprendido una vez más por la rápida respuesta de su cuerpo y por la ausencia de dolor, se apresuró a ponerse de pie. Entonces comprobó que su equilibrio se había recuperado igual que todas las funciones de su cuerpo.

Lleno de emoción corrió y, literalmente, atravesó la puerta de su habitación, y se movió ligero como una pluma hasta llegar a la habitación de Jennifer. Ella aún estaba enferma, y sus ojos se abrieron enormes cuando vieron entrar a Luis tan campante. Luis se sentó en la cama a un lado de su hermana y presionó su Evolutor por el centro y este empezó a emitir un brillo pulsante.

El Evolutor de Jennifer comenzó a emitir un sonido “Beep” intermitente, y Luis se lo acercó para que ella lo pudiera tocar. Cuando ella lo tocó el evolutor dejó de hacer ruido. Pasados unos minutos el Evolutor de Luis dejó de brillar. Entonces él se lo acercó al rostro y le habló, como si hablara por un intercomunicador.

—Sé que todos están escuchándome. Pero creo que será más fácil si me responden… ¿Quiénes no han enfermado aún?

Se hizo un silencio de unos segundos. Poco antes de completarse el minuto se escuchó la voz de Laisha.

—Solo nuestros amigos brillantes y yo estamos sanos, Luis. ¿Tú cómo estás? ¡Te oyes mejor!

—Parece ser que ya me encuentro bien, hermanita. Vamos a ver… Todos, por favor, sin excepción, necesito que involucionen y nos vemos en el gimnasio de la escuela en 15 minutos.

No hubo respuesta. Jennifer miró a su hermano extrañada, pero de todas formas obedeció

— ¡Involución!

Ella tardó menos que Luis en darse cuenta de cómo había recuperado la salud. No podía dejar de mirar a su hermano con un enorme signo de interrogación dibujado en el rostro.

— ¡Ya sé qué nos está pasando, Jennifer!

Luis, al contrario de su hermana, tenía el rostro lleno de satisfacción, pero al mismo tiempo de una gran preocupación.

Final del capítulo 7
Esta Historia Continuará…
Espera el capítulo 8

 

-------------------------------------------------------------------

 

En el Siguiente Capítulo:

Efectivamente, Luis halló la forma de evitar el dolor, pero sacrificando sus poderes. Sin embargo todo esto es a causa de un extraño mineral aheroceloín con diferentes y maravillosas cualidades. Involucionar detuvo la enfermedad, pero no es una cura. La cura está oculta en algún lugar de la memoria de Luis, y deberá hacer su máximo esfuerzo por recordarla.
Mientras tanto, su condición humana, sin poderes, le permite a los Dark Warriors una gran oportunidad para acercarse a Serena y sus amigas. Los Light Warriors volverán a luchar junto a las Sailors, pero la imprudente intervención de Luis despertará la ira de Time Black. Al parecer, ahora todo estará perdido

 

¡No te pierdas el capítulo 8 de “Sailor Moon y Los Star Warriors”!:

El Alharium
 
 

-------------------------------------------------------------------

 

En el Siguiente sub-capítulo:

No es Dejabú, ni es repetición. Es importante que el capítulo 8 comience exactamente donde terminó el 7. Por eso encontrarán el primer sub-capítulo muy parecido al anterior. Aún así no dejen de leerlo, pues habrá detalles que servirán para comenzar el penúltimo capítulo de esta historia

 

SM&SW-8.01: Involución

 

¡Vaya! ¡Qué mareo! No es lo mismo saltar así sin poderes… ¿Verdad?
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario